martes, 16 de abril de 2019


La Leyenda del Capitán (2º edición)

           
           Entrar en la Historia es abrir una puerta apasionante al pasado. Pero en ese pasado no solamente existen sucesos oficiales, pasajes recogidos en libros que estudiarán los muchachos en el colegio de manos de sus profesores. En ese pasado existen rincones y cosas desconocidas que a veces, de forma accidental o pretendidamente estudiada, un día amanecen a los ojos de los investigadores, y por tanto, a los ojos de la humanidad.

            Cuando nos sumergimos en la historia del S. XVII, en el apogeo del Imperio Español, observamos una extraña realidad, un extraño mundo en el que conviven la más extrema pobreza de las clases humildes y el emporio más emblemático y extraordinario de la grandeza de las clases dominantes de la nobleza, que en este momento se vanaglorian de la opulencia que su descendencia les ha trasmitido, a través de la pureza de sangre, para ser protagonistas de una época que no obstante no les va a durar una gran parte de la Historia.

           Frente a ese escenario tan hermético, tan prepotente y tan poderoso se hallan aquellos que no se conforman con lo que les ha tocado, aquellos que se plantean romper con un destino que consideran injusto, con una suerte que no están dispuestos a admitir a pesar de saber lo que les espera cuando infrinjan las normas de los dirigentes: los filibusteros. En el S. XVII, la Corona española aún posee las tres cuartas partes del planeta bajo el escudo de la corona imperial de los Austrias, como una posesión que se hereda de padres a hijos, para lo cual no importa que los matrimonios se formen entre hermanos, tíos y sobrinas, primos o cualquiera que asegure esa pureza de sangre, y por tanto, esa pureza del poder universal inviolable, que parecía asimilarlos al mismo Dios, y que contribuiría, entre otros errores políticos de la época, a la depreciación de esa realeza decadente.

            Las Flotas de la Carrera de Indias son en este momento la llave que asegura tanto el mantenimiento de esa riqueza como las vías de comunicación con el Nuevo Mundo y con oriente; gracias a ellas, las riquezas inabarcables de aquella tierra robada a los indios a sangre y fuego, continúa alimentando las arcas de la nobleza castellana más castiza en la península, al tiempo que garantiza su representación en la tierra americana con títulos y posesiones tan grandes, como la ambición que ostentan en sumo grado ante las naciones extranjeras, que observan con agresiva envidia y deseo desfilar los grandes galeones cargados de oro, plata, piedras preciosas y objetos de lujo de países desconocidos, rumbo a los palacios señoriales de los virreinatos y de la corte de Madrid, a pesar de que en la práctica, esas mismas naciones serán más poderosas a través de su comercio y su mentalidad moderna, que la vieja corona de Castilla a través de sus oxidados y equivocados empeños.

            Sin embargo nada ni nadie en este mundo tiene la vida comprada, mucho menos las posesiones materiales que un día dejaremos en el presente al morir, y en ese presente, los piratas ingleses, franceses y holandeses principalmente, entre otros, se comienzan a preguntar qué ocurriría si todo aquel patrimonio se repartiese un poco más equitativamente... Acaba de nacer la nueva piratería de la Edad Moderna en el legado del S. XVII.

            Hacia el año 1620, ante la llegada masiva de franconavegantes de todo tipo y condición, cada uno con una historia personal distinta, cada uno con una motivación, una religión y unos ideales diferentes, confluyen en islas que acogen mirando para otro lado a todo tipo de estrafalarios personajes, que reunidos en rincones como Tortuga, Cuba, Barbados o Jamaica comienzan a planificar atacar no ya los barcos, sino las mismas colonias de donde salen las riquezas que transportan las naves, aquellas que en una ruta atraviesan el istmo de Panamá para llegar al Pacífico, en otras confluyen en sus puertos para reunir la plata de Potosí, y sin pensarlo mucho, asaltan ciudades como Campeche, La Habana, Maracaibo...
            Piratas como Jean David Nau el Olonés, Henry Morgan, Bartolomew Sharp, Bartolomew Roberts alias Bart el Negro, Howel Davis, Basil Ringrose, Edward Teach alias Barbanegra, Benjamín Hornigold, Charles Swan, De Pointis y tantos otros... formaron cofradías de asaltantes de barcos y ciudades donde no se respetaban ni vidas, ni prisioneros ni banderas, en una carrera imparable que solamente ofreció como premisa positiva el conocimiento de nuevos territorios mejorando la geografía, así como la evolución de una mentalidad social y  militar que tuvo que reconocer que el imperio español ni era tan poderoso, ni era tan inaccesible como pretendieron aquellos emperadores del pasado, para aceptar compartir todo un inmenso y extraordinario continente con el resto de las naciones del planeta, que ya han previsto anclar en sus propios territorios.

            Ante esta perspectiva, la Historia se jacta de confesar que no todas las historias han sido contadas, no todos los sucesos han sido conocidos ni todos los avatares relatados. En este punto nace la novela histórica La Leyenda del Capitán para ofrecernos una visión histórica y legendaria de una trama basada en sucesos que sí ocurrieron, en personajes que se miran en las páginas de su relato, en emocionantes escenarios que reflejan aquel brillante y emocionante imperio donde no se ponía el sol, que reflejan las leyendas ocultas a la historia oficial, las rutas de barcos conocidos y desconocidos, de capitanes nunca nombrados, de personajes que solamente existen en la ficción fabricada por el novelista en sus noches de insomnio, para trasmitir al mundo esas letras que secuestran al lector con sus pasajes, con su misterio, con su magia, esas páginas de la historia que solamente aquí conocerá, esos secretos que le invitan a adentrarse en unos capítulos que ya nunca olvidará, ayudándolo a ver el pasado con otros ojos, con otro carisma.

            ¿Qué ocurrió con aquellos tesoros nunca encontrados?, ¿qué ocurrió realmente tras aquellos abordajes y asedios?, ¿dónde están aquellos nombres desconocidos que desparecieron de los libros de Historia?, ¿puede alguien por azar descubrir lo que nadie en el mundo ha sido capaz?, es en este momento cuando la leyenda y la Historia se alían para ofrecer al lector un relato apasionante y lleno de contenido, que lo lleva de la mano cada minuto para hacerlo disfrutar de esas páginas caprichosas que forman La Leyenda del Capitán... bienvenidos a bordo... Gracias.

lunes, 8 de abril de 2019


ENTREVISTA LITERARIA EN RADIO CENTRO (ÁVILA)



                Hace muchos años que escribo. Hace muchos años que a tenor de esas letras, he compartido con el mundo ideas, proyectos e impresiones en calidad de obras de carácter profesional y literario, que llegan a las personas a través de mis libros y a través de mi blog personal.



          Debido a esta trayectoria que desarrollo desde que era un niño de 10 años, he venido realizando entrevistas a lo largo de todo ese tiempo, tanto en televisión cuando era muy joven, como en la radio años después. La última de ellas que he llevado a cabo tuvo lugar el pasado día 24 de enero en los estudios de Radio Centro, en las instalaciones ubicadas en la capital de Ávila, donde tuve el honor de encontrarme con este magnífico equipo de reporteros a través de la invitación de Jose Luis Lázaro, uno de sus miembros y colaboradores que hacen posible que cada día disfrutemos de sus programas radiofónicos en la red de internet.




         Nuestro encuentro estuvo centrado en mi novela histórica LA LEYENDA DEL CAPITÁN, cuya 2ª edición verá la luz en breve publicada por la Editorial Círculo Rojo, y sobre la que tuve el placer de hablar gracias a las preguntas planteadas por nuestro amigo Jose Luís, que junto a su compañera Gloria se interesaron por mi día a día, mi trabajo y mis obras literarias, ayudándome a compartir con nuestros oyentes y lectores una apasionante profesión y una exquisita trayectoria que llevo toda una vida alimentando con mi pluma.



         Desde estas líneas, y desde este espacio personal representado por mi blog, quiero agradecer a este extraordinario equipo, cuyos espacios cautivan a diario a miles de seguidores, la oportunidad de dar a conocer mi trabajo y mis obras gracias a su profesionalidad y su buen hacer, para que no dejen de cautivarnos con sus eventos y su positivo afán de dar a conocer cada día labores y personas que quizá estarían un poco más en la sombra sin su ayuda y su colaboración.



         A través de este artículo deseo animarles para que continúen en la misma línea radiofónica a través de la red mundial, deleitándonos con su dedicación profesional y esos buenos momentos que mejoran nuestra vida, mientras muestran al mundo que nos rodea historias, sucesos y personas que de algún modo forman también parte de ese curioso planeta en el que vivimos, y que ellos, de un modo sutil, agradable y entretenido se congratulan en compartir cada jornada.




         Animo a todo el mundo a que goce de la capacidad de Jose Luis para investigar con sus programas, en los que podremos escuchar la hermosa voz de Gloria destacando en la entrevista histórica realizada para todos, para los que estáis ahí cada día, leyendo y escuchando a quienes vivimos para compartir nuestra labor, ya sea en el aire, en la red o en el papel…. muchas gracias.



         Un cálido saludo a todos los participantes del grupo que ese día me acompañaron en el tiempo que estuve en los estudios de Radio Centro…, desde el corazón de este escritor, desde este rincón personal,  les deseo lo mejor y me ofrezco a colaborar con todos ellos y con su programa en consenso con futuros espacios radiofónicos, especialmente sobre investigación e Historia, que puedan llevar a cabo.



         Un abrazo a todos, amigos, gracias por estar ahí….




Fernando G.F.