domingo, 10 de julio de 2011

"EL SOLDADO 39"

        He compuesto muchos poemas a lo largo de mi vida, quizá un buen puñado de centenares de ellos, y todos los versos que he compuesto, recitan vivencias o sueños reflejados con más o menos realidad, aventuras o pensamientos nacidos al albor de algún momento de mi vida. Cada poema es único, no existe en ningún lugar del planeta otra composición que sea idéntica a cada uno de estos poemas, y en esa esencia han sido publicados y compartidos con el resto del mundo.

        Sin embargo, existe un solo poema de los que aparecen en la obra "Estela Prodigiosa" que tiene un hermano casi gemelo, y afirmo que es casi gemelo, porque se trata de la única composición que he escrito a lo largo de mi vida que posee otra versión del mismo, parecida, pero no igual. La versión publicada aparece en la página 189 de mi libro, que lleva el número romano XLVIII, y pertenece a la segunda parte del Libro Segundo, el cual recoge las composiciones escritas bajo el título de Grandes Poemas, pero la versión clandestina de éste único poema fue creada tiempo antes que su hermano publicado en 2010, por lo que podemos confesar que éste poema es el antecesor del que se puede leer en la obra editada.

        La razón que pudiera explicar que esta composición haya vivido en la sombra, y no haya sido publicada en lugar del que se encuentra en la obra salida a la luz, reside en que, tanto el contenido como el significado de esta composición, podría ser reflejo de varios puntos de vista diferentes, y la visión esquematizada para componerlo, pasaba en su día por una labor compleja para considerar lo que es y lo que no es, a la hora de plasmar sentimientos y emociones distintas, y dejarles marcados con letras.

        Ahora, tantos años después, cuando el joven hermano perdido de éste poema ha visto alcanzar la luz a su otro yo, y ha salido por fin al escenario, quiero compartir con el resto de los lectores la otra versión guardada de este poema, a fin de que pueda llenar un momento del espacio de cada persona, con la esperanza de que cumpla la misión que mi pluma le encomendó en su momento, cuando fue creado. Para todos vosotros.

El soldado 39
escribió una triste
canción,

nació en un campo
de batalla
al amparo de un cañón,

el soldado 39
era una leyenda
perdida,

le colocaron
una corona,
una espada
y una espina,

era el gladiador
de los cielos
llevaba siempre
esta herida,

el soldado 39
vendió su corazón,
su mente
estaba deshecha
al igual
que su nación,

y sus pasos
le llevaban
a cometer
una traición,

por ello Dios
que le escuchaba,
le hizo su gladiador,

"ahora lucharás
por siempre
y siempre serás
vencedor,

porque los ángeles
nunca mueren,
son los hijos
de mi legión,

pero no pueden
enamorarse,
esa es mi condición".

12 de diciembre de 1996.
       

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